En los últimos 100 años México cambió radicalmente. En 1910 la población nacional era cercana a 15 millones y el 71 % vivía en y del campo. En 2010 había 108.4 millones de habitantes, el 22.2 % vivía en zonas rurales y aun cuando el PIB agropecuario creció mucho, sólo representaba el 3.7 % del PIB nacional. (1)
A finales del S.XX se dio un cambio trascendental de política económica al aplicarse doctrinas neoliberales iniciando la apertura comercial del país, incluyendo la puesta en marcha del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994.
En el TLCAN hubo ganadores y perdedores. Los principales ganadores fueron las empresas automotrices y la industria electrónica que encontraron en México mano de obra barata para ser más competitivos en sus mercados. En el sector agropecuario los ganadores fueron los grandes productores y los comercializadores de granos, de frutas y de hortalizas, mientras que entre los perdedores quedaron los pequeños productores de granos con algunos excedentes para comercializar.
La apertura comercial del TLCAN se dio en un período de 15 años que concluyó en 2008 con los productos agropecuarios más sensibles (maíz, frijol, azúcar, leche en polvo y jugo de naranja congelado). En 1990, justo antes de negociar el TLCAN la productividad por persona ocupada en la producción de maíz en Estados Unidos (EU) era 18 veces mayor que en México. El costo de producción por tonelada de maíz en EU era de $93 dólares y en México de $180. Mientras que EU producía 170 millones de Ton de maíz, México produjo 14.6 millones. Los negociadores del TLCAN suponían que en un plazo de 15 años se podrían igualar las condiciones de competencia, lo cual no sucedió, haciendo de México uno de los principales clientes del maíz americano y de otros productos agropecuarios.(2)
De la clara la desigualdad entre ambos países se deduce que el sector agropecuario mexicano fue “moneda de cambio” en los acuerdos de los otros sectores para el TLCAN. A los negociadores con mentalidad liberal les resultaba fácil decir que “sobran campesinos en el campo mexicano” y que sería mejor traer el maíz de donde salga más barato en lugar de producirlo en México, sin visualizar que las condiciones climáticas, energéticas o políticas pueden convertir los alimentos en bienes estratégicos para un país que dependa de la importación de los mismos, tal como ya ha sucedido con el maíz. Para México es estratégico conservar su producción de alimentos. Esto no implica que sea totalmente autosuficiente, pero por lo menos que produzca un alto porcentaje de lo que consume.
Productores mexicanos han solicitado por años que se revise el capítulo agropecuario del TLCAN, mucho antes de que Trump apareciera en la escena política. Según Trump, México ha mantenido bajos los salarios haciendo una competencia desleal contra los trabajadores americanos, logrando con ello que las empresas manufactureras trasladen sus fábricas a México, por lo que busca con la renegociación que esos empleos regresen a EU.
Por lo anterior, al renegociar el TLCAN hay que:
Proteger y estimular la producción de maíz, porque aun cuando hay opiniones de que es posible comprar el faltante en Argentina, Brasil o Ucrania, el cambio de proveedores y transportadores puede tomar meses o años y con las mismas desventajas estratégicas que hay ahora.
Reconocer 3 tipos de productores: autoconsumo, transición y comerciales con políticas públicas diferenciadas para cada estrato y el TLCAN debe permitir diversos tipos de subsidios y estímulos adecuados regionalmente. (3)
Diseñar una ley como la “Farm Bill” de los EU que permita planear en un horizonte de 5 años y establecer presupuestos y apoyos multianuales para el sector agropecuario.
Otros productos importantes en la renegociación del TLCAN son aguacate, jitomate, frijol, etc. pero sobre todo se requiere que los negociadores oficiales escuchen antes a los productores…
Autor: Rodrigo Diez de Sollano
Twitter: @DeSollano
Fuentes de Información
1. INEGI-Censos Históricos
2. La Disputa por los Mercados-Cámara de Diputados-1992
3. Villa Issa Manuel-¿Qué hacemos con el Campo Mexicano-Colegio de Postgraduados-2011