sábado, 30 de junio de 2018

¿QUÉ HACER DESPUÉS DE LAS ELECCIONES 2018?

Después de las elecciones y antes de cualquiera otra acción, a los(as) mexicanos(as) nos urge una “operación cicatriz” porque en esta campaña electoral ha habido demasiadas heridas entre amigos, entre hermanos y parientes, entre compañeros de partido y entre rivales políticos. Heridas que no contribuyen en nada positivo a la convivencia pacífica entre compatriotas.

Nos urge “re-conocernos” para poder construir un país en el que todos(as) podamos vivir en paz, independientemente de quien haya ganado las elecciones.

El 1º de julio de 2018 decidiremos los(as) mexicanos(as) quienes nos gobernarán por los siguientes 3 o 6 años, no solamente el próximo Presidente de la República, también elegiremos gobernadores en varios estados, senadores, diputados y presidentes municipales.

Soy de la opinión de que los resultados de las elecciones son parte muy importante del cambio que requiere el país, pero no todo se resuelve con nuevas autoridades.

Si los(as) mexicanos(as) comunes seguimos participando en actos de corrupción y protegemos la impunidad de los delincuentes, sean o no funcionarios públicos, las cosas seguirán igual.

Si continuamos pensando y actuando bajo el lema de “el que no transa no avanza”, nuestro país no cambiará, así tenga los mejores gobernantes que pudiéramos elegir.

Si cada uno(a) de nosotros(as) proseguimos contaminando el medio ambiente con plásticos que no reciclamos o con el uso excesivo de combustibles fósiles en los automóviles, no habrá gobierno que pueda resolver la problemática ambiental global que creamos…

Si estacionamos nuestros automóviles en lugares prohibidos o circulamos a altas velocidades, ningún sistema de vigilancia del tránsito solucionará los accidentes que provocamos.

Si seguimos desperdiciando el agua, tarde o temprano sufriremos la escasez o la falta total de la misma y nos quedaremos esperando que “el gobierno” haga algo para solucionar el problema.

No podemos permitirnos descargar las responsabilidades que tenemos como ciudadanos en las autoridades de cualquier nivel, porque EL CAMBIO DE FONDO ESTÁ EN CADA UNO(A) DE LOS(AS) CIUDADANOS(AS), ya que de otra forma, las libertades que tenemos como habitantes de un país democrático las pondríamos en manos de funcionarios públicos electos o designados, lo cual ¡NO ES NADA DESEABLE!

Así que en cuanto pasen las elecciones urge que retomemos nuestro rol de ciudadanos(as) observadores, responsables, libres y críticos antes las acciones de los funcionarios públicos, ya sean recién electos o de tiempo atrás…

AUTOR: Rodrigo Diez de Sollano

Twitter: @DeSollano

martes, 19 de junio de 2018

ELECCIONES 2018: ¿Recta Final o Recta Inicial?

Después de muchos meses de pre-campañas y campañas políticas, finalmente nos acercamos al día de las elecciones. ¡Por fin! se acabarán los largos y aburridos spots de todos los candidatos y tendremos la responsabilidad de votar.

Pero ahí no se terminan nuestras obligaciones como ciudadanos, de hecho ¡apenas empiezan!  ya que debemos asegurarnos de que el conteo sea correcto y las urnas lleguen a su destino…

Y una vez declarados los candidatos ganadores tendremos que verificar que éstos cumplan con sus promesas de campaña.

Dicen que “prometer no empobrece, dar es lo que aniquila”. Hay grandes promesas de acabar con la corrupción y la impunidad; de desarrollo económico; de desarrollo social; de uso de energía renovable y de cuidado del medio ambiente; de paz… etc. La parte difícil es volver realidad todas esas promesas, porque no es un asunto sólo del próximo Presidente o de “el gobierno”, sino de todos los(as) ciudadanos(as) y no podemos esperar que el Presidente venga a resolver todos los problemas del país como si fuera “todopoderoso”.

Si queremos que en México no haya corrupción, los primeros en evitar actos de corrupción debemos ser los ciudadanos, porque en la mayoría de los casos de corrupción se necesitan cómplices del sector público y del sector privado.

Si deseamos un medio ambiente sano, quienes debemos dejar de contaminar somos cada uno de los ciudadanos y no esperar que “el gobierno” aplique medidas coercitivas para evitar que contaminemos el territorio nacional, los ríos, lagos y mares.

Si realmente queremos una sociedad más justa y equitativa, cada uno de los mexicanos debemos empezar a tratar a nuestros semejantes como nos gustaría ser tratados, con justicia en el trabajo y en la vida privada y no esperar que “el gobierno” resuelva todos los asuntos a base de leyes y decretos.

Si pensamos que se requiere crear empleos para los jóvenes o para las madres jefas de familia y para personas adultas que no encuentran trabajo, los tendremos que crear desde la sociedad civil, sin esperar que surjan fuentes de trabajo creadas por “el gobierno”. El rol del gobierno es más de crear las condiciones o el “ambiente” requerido por la sociedad civil para desarrollar sus actividades en paz y seguridad, en lugar de tratar de resolver directamente la creación de fuentes de trabajo.

Aunque hay actividades que por ser de beneficio público y no generar ingresos que las hagan autosostenibles, quedan como responsabilidad del Estado, aún así la sociedad civil tiene que participar para asegurarse de la transparencia y buena calidad de los servicios públicos y el cumplimiento de las promesas de campaña de los candidatos electos.

Esta es la oportunidad y el momento adecuado para que las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) nos “pongamos las pilas” y nos comprometamos a darle seguimiento a las acciones de los gobiernos municipales, estatales y federal, que tomarán posesión en diciembre de 2018.

Las posiciones de los funcionarios gubernamentales son temporales e implican “rendición de cuentas” no sólo al final de su mandato, sino a lo largo del tiempo para el que fueron electos (o designados). Pero esto requiere de ciudadanos y de OSC que den seguimiento a las labores de los funcionarios públicos para verificar que cumplan con honestidad, eficacia y transparencia, porque no solamente se trata de no robar, sino de usar adecuadamente los recursos públicos a su cargo, ya que no hay honestidad sin un trabajo eficaz y a la vista de toda la sociedad civil.

Es ahora (antes de que tomen posesión los nuevos mandatarios) cuando debemos exigir que se establezcan los mecanismos de vigilancia pública y las formas de evaluar el trabajo de los funcionarios gubernamentales y de informar a los ciudadanos.

Esta “Recta Inicial” durará 5 meses, del 2 de julio al 1º de diciembre de 2018,..


Autor:
Rodrigo Diez de Sollano

Twitter:
@DeSollano

martes, 12 de junio de 2018

TALLER: ARTE PARA CONSTRUIR LA PAZ

Continuando con el artículo de la semana pasada, les comparto algunas imágenes del taller para niños y niñas "Arte para construir Paz" que se está llevando a cabo en este verano 2018 en una escuela primaria de una colonia en la Zona Metropolitana de Guadalajara, con altos índices de violencia.






El taller incluye 4 horas por semana y ya desde la segunda sesión se empiezan a notar cambios de conducta en los niños reduciendo el bullying entre ellos, siendo más amables con sus compañeros y con los maestros. Esto incluye decir "por favor" y "gracias", guardar silencio cuando se requiere oír a los facilitadores del taller, no molestar a los compañeros, etc. e incluso llevando estos nuevos comportamientos a sus casas (para sorpresa de algunas madres de familia).

Son pequeños avances, pero muy notables porque estos niños están inmersos en un ambiente hostil  en donde lo que se valora es la ley del más fuerte e impera la violencia en sus casas, en la calle, en la escuela, entre los amigos, etc.

La clave del cambio está en el trato amable y pacífico hacia los niños por parte de quienes conducen el taller y les trasmiten paz con su lenguaje, con sus actitudes, con la forma de dirigir las sesiones del taller, con la música que escuchan los niños durante las sesiones, y claro, con el hecho de que al estar pintando están expresando así sus sentimientos más profundos. Al final el mensaje es: la violencia no se combate con más violencia sino con la Paz...

Si le interesa apoyar la realización de otros talleres (como ya lo hizo una empresa en este caso y lo han hecho otras empresas y personas individuales), puede ponerse con contacto con:
portavocesdepaz@gmail.com

Fuentes de información
Portavoces de Paz A.C.
Fotos de Dolores Pérez-Lazcarro

lunes, 4 de junio de 2018

SI QUEREMOS PAZ ¡PREPARÉMONOS PARA LA PAZ!

Colaboración de Dolores Pérez-Lazcarro
Directora de Portavoces de Paz A.C.

Cuando tenía 6 años la mamá de John murió y su papá cuando tenía diez. En ese tiempo un grupo armado de Sudán del Sur se lo llevó junto con otros amigos a los que mataron frente a sus ojos, luego le dieron un fusil y lo convirtieron en soldado. Esta es una historia que se repite en varios países de África, un continente que está muy lejos de nosotros.

Ahora vayamos a una colonia que se encuentra a unos minutos de distancia de tu casa, ahí vive Emiliano, que con sus enormes ojos me cuenta que “el otro día encontraron a un señor muerto pero sin cara, le arrancaron la cara maestra”, “Uh, eso no es nada, allá cerca de la mía encontraron en una bolsa a uno descuartizado” le interrumpe Doroteo. Historias de asesinatos, muertos, personas que ya no regresan a casa, balaceras y camiones incendiados es lo que ven en el noticiero, en su casa, en su colonia y camino a la escuela. (Los nombres han sido cambiados para protegerlos).

Esta es nuestra realidad, con el clima de violencia en que vivimos, estamos entregando a nuestras niñas y niños otra especie de armas: gritos, golpes, violencia psicológica, comunitaria, que a la larga, se pueden todas ellas convertir en un fusil.

Necesitamos intervenciones urgentes que nos ayuden a que nuestra infancia desarrolle y practique habilidades para resolver conflictos, conocer que la paz es un camino que pueden recorrer y saber que pueden ser portavoces de ella. Para nosotros el arte es una maravillosa opción. A través de él, se puede enfocar una forma distinta de ser y actuar, reinventarnos como personas y edificar sociedades pacíficas, es decir, el arte como propuesta creadora de una realidad sin violencia, el arte como una gran oportunidad de explorar situaciones internas del ser y externas del quehacer. El arte en muchas ocasiones se convierte en el espejo de lo que somos, nos ayuda a percibir realidades que algunas veces no alcanzamos a ver a simple vista y que las traemos en nuestro subconsciente.

En el mundo, los ejemplos de trabajos artísticos relacionados con finalizar los conflictos violentos y sociales son abundantes. En Sudáfrica, por ejemplo, se creó una movilización cultural paralela a la Comisión de la Verdad sobre la violencia racial del Apartheid. En Estados Unidos, Cynthia Cohen dirige el proyecto Peacebuilding and Arts, que busca destacar las contribuciones de la cultura y las artes a los procesos de posconflicto. Y en Ecuador, Arístides Vargas forjó una importante carrera teatral luego de exiliarse ante las persecuciones de la dictadura militar argentina.

Estoy coordinando en la escuela de Emiliano y Doroteo, el proyecto “Arte para construir Paz”, trabajamos con 25 niños que en poco tiempo estarán pintando sobre sus sueños, realidades, sobre ellos mismos. El taller está diseñado para aprender a construir paz en ellos mismos y a su alrededor, después, a través de la pintura expresan sus avances, nuevas habilidades y aprendizajes.

Somos tres personas, una maravillosa pintora que con su sensibilidad nos enseña los principios del proceso creativo, un joven psicólogo con la mochila llena de esperanzas para cambiar el mundo y un panecillo para compartirnos cuando nos llegue el hambre. Finalmente yo, que agradezco cada minuto que paso con estos niños porque sus rostros y sus sonrisas me dan fuerzas para contener las lágrimas cuando me cuenta uno de ellos que su mamá lo golpea con un cable mojado...”sí, me pegan como si fuera un animal”, sólo tiene 6 años. Otro dice “a todos nos pegan maestra, pero es que es porque nos portamos mal”... En una dinámica para que ellos identificaran su lugar y personas seguras, uno de ellos solo pudo dibujar a su perro...  La espiral de la violencia empieza en casa, no hay lugar para esconderse de ella, luego, en la calle, está el acecho de otros: “a veces salgo con mi abuelita pero me pongo muy nervioso, es que si nos encontramos al que le dicen “el monstruo”, le empieza a gritar cosas muy feas y me da mucho  miedo...”

Todo esto, está dejando en la vida de estas niñas y niños y cientos de miles más por todo el país, huellas que después serán muy difíciles de borrar. Sabemos que somos una gotita en medio de un océano, pero como decía la Madre Teresa de Calcuta: “Que sería ese océano sin sus gotas”.

Desde esta columna pedimos tu apoyo para multiplicar las gotas y llegar a más escuelas. Encontrarás información en la página de Facebook Portavoces de Paz o escríbenos a portavocesdepaz@gmail.com y hagamos que la vida de nuestros niñas y niños, sea maravillosa, en donde puedan hacer realidad todos sus sueños y su realidad no sea una pesadilla.

Twitter: @DeSollano

Fuentes de Información
Portavoces de Paz A.C. - Proyecto Arte para construir la Paz