lunes, 8 de junio de 2020

CARTA A DIPUTADAS Y DIPUTADOS: covid-19

Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión

Señoras y Señores Diputadas(os)

Los impactos de la pandemia de COVID-19 en la economía de México y del mundo han sido muy importantes, debido principalmente a la suspensión de actividades económicas y a la permanencia de las personas en sus casas por instrucciones de las autoridades de salud con el objeto de reducir el contagio de esta enfermedad, por lo que urgen acciones de gran escala para volver a tener crecimiento económico pero sin poner en riesgo la salud de la población.

Conforme se reduce el crecimiento de casos confirmados de COVID-19 y avanza la puesta en práctica de la reactivación económica hacia la “nueva normalidad", se hace necesario un detallado recuento de los daños económicos y sociales para actuar en consecuencia, por ejemplo:

Miles de empresas sin capital de trabajo para poder operar.
Otros miles de empresas en quiebra.
Millones de personas despedidas de sus trabajos o “puestos en descanso” por sus empleadores, sin fecha definida para regresar al trabajo.
Millones de mexicanos(as) en pobreza o en extrema pobreza.
Millones de personas con hambre.

Cada una(o) de Uds. diputadas y diputados puede ponerle números e incluso nombres a cada uno de los renglones anteriores, porque conocen cómo estaba y cómo quedó la situación económica y social de sus distritos electorales después de estos meses de confinamiento en casa y de suspensión de la mayoría de las actividades económicas.

La reactivación de la economía tomará su tiempo, tal vez varios años, por lo que existe el riesgo que
estos daños generen malestar social que a su vez en poco tiempo podría degenerar en más pobreza, hambre, violencia y disturbios que a nadie favorecen y si en cambio facilitan la instauración de regímenes autoritarios.

Es en este momento que se necesita una “inyección” de energía a la economía nacional que tenga efectos de “reacción en cadena”, partiendo del gasto que podría hacer cada ciudadano. Es por ello que hago un llamado muy insistente a todos(as) las(os) legisladores(as) para que sin distinción de partidos y con el objetivo de reparar, (aunque sea parcialmente) los daños colaterales causados por la pandemia de COVID-19 en la economía personal y familiar, aprueben la creación del Ingreso Básico Universal (IBU) y al mismo tiempo se le dote con los recursos suficientes para que a cada ciudadano mexicano, es decir, personas mayores de 18 años, se le entregue mensualmente la cantidad de $3690 (equivalentes al salario mínimo) a partir de mes julio y hasta diciembre de 2020, para que lo utilice libremente.

Además del impacto positivo en las finanzas personales de cada mexicano(a), servirá de “paracaídas” en caso de que esa persona no tenga un trabajo remunerado y por otra parte tendrá un impacto positivo en la economía del país al inyectar un importante flujo de recursos en los circuitos económicos. Lo anterior agregado a la inversión pública y privada que generarían fuentes de trabajo cuyos sueldos se sumarían a los ingresos de sus empleados por concepto del IBU.

¿Cuánto costará y de donde saldrá ese dinero?
Un programa de la magnitud del IBU necesita acciones de gran escala que incluyen reasignaciones en las partidas del Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 y la contratación de préstamos internacionales a largo plazo. Aquí viene la parte importante de la participación de los(as) legisladores(as), ya que será necesario reasignar partidas presupuestales 2020 y del ejercicio 2021 cuando se prepare el presupuesto de ese año.

Los efectos negativos en la economía del país por la suspensión de actividades de las empresas e instituciones ordenada por las autoridades de salud, cada día son más angustiantes para los(as) ciudadanos(as) y causan grave impacto en las finanzas personales y empresariales y también en las finanzas públicas, por lo que es urgente que las medidas correctivas se pongan en práctica en muy corto plazo, es decir, antes de que finalice este año, es por ello que atentamente solicito su voto favorable para la creación del INGRESO BÁSICO UNIVERSAL y para las modificaciones que requiera el Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 y para aprobar las partidas necesarias  para incluir el IBU en 2021. Estas acciones legislativas permitirán lograr simultáneamente los objetivos económicos y de salud requeridos por los(as) mexicanos(as).

La historia de México les reconocerá su valentía y decisión.

Atentamente

Rodrigo Diez de Sollano

Twitter: @DeSollano

2 comentarios:

  1. Es la obligación de senadores diputados ver por está necesidad, pero como malos Mejicanos que son no harán caso, palas mi comentario los señale como malos y saquen la casta y me callen la boca

    ResponderEliminar
  2. Querido Rodrigo, es lo mínimamente responsable que se tendría que hacer y ojalá hubiera muchas voces y propuestas como la tuya. Desgraciadamente nuestro congreso está sometido a la megalomanía, prepotencia, soberbia e ignorancia del pastor..."me canso ganso"
    Un abrazo

    ResponderEliminar